domingo, 28 de octubre de 2007

El camino del I Ching


(Para los que no hayáis oído jamás del tema os recomiendo que primero entréis en Wikipedia porque la definición es realmente buena y segundo que no leáis este artículo… es pronto para entenderlo!!!!)


Ya lo he escrito, emborronado o plasmado en algún artículo de este blog pero hoy me reitero en algo en lo que no suelo parar mucha atención: el destino está escrito???? Empiezo a convencerme de verdad (no de boquilla como hasta ahora, no poniendo frases de otros en mis pensamientos) de su existencia.

¿Por qué cuando hace más de 2 años que no ves a alguien vuelve de repente a tu vida? ¿Por qué de pronto tu vida da un vuelco y necesitas de la experiencia, el consejo de esa persona, de su escucha activa? ¿Por qué decides una mañana consultar el I Ching y te devuelve frases que la noche anterior te dijo la persona a la que hacía 2 años que no veías? (Hexagrama 40: La liberación. El peligro mencionado implica una situación que podría ser resuelta con un cambio en nuestra actitud. No hay culpa. Hexagrama 61: La verdad interior)

¿Por qué hay libros que te dejan justo en el momento oportuno? ¿Por qué se te ofrece una oportunidad de trabajo 2 meses antes de que la empresa en la que estás cierre por quiebra? ¿Por qué de pronto acompañas a una anciana con demencia senil a buscar su casa y en un intento te sorprende un antiguo amante forzando su cerradura? ¿Por qué la psicóloga que te han recomendado resultó vivir en tu mismo bloque? Podríamos pasar horas y más horas haciendo preguntas (para algunos absurdas… para los que sabéis de que hablo quizás menos, o no!)

Se me escapan mil cosas pero hay al menos dos que tengo claras: el cambio es una realidad en sí misma y el azar no existe.

En su día confucionistas, Carl Jung y mi “andaluza preferida” abrieron una puerta en mi casa… la puerta del cambio y hoy por fin empiezo la práctica!!!!

Hay teorías que cuestan 1 vida aprender y es cuestión de segundos desaprenderlas pero hoy sí, hoy empiezo a liberarme del dedo gordo del pie.

Dejo una frase para aquellos inconscientes que no hicieron caso en mi paréntesis cuando dije “no leáis este artículo”, pero sólo una frase como reflexión que he recordado y que hago mía en estos momentos de mi vida: HACE MÁS LA CONSTANCIA DE UNA GOTA QUE LA FUERZA DE UNA OLA.

Mimaros, quereros, valoraros… somos únicos!!!!

miércoles, 17 de octubre de 2007

Trastorno afectivo emocional

El otro día me hicieron una sesión de Reiki en la que, como poco, pude relajarme. Dado los tiempos que corren donde el estrés es, además de una palabra hasta hace unos años desconocida, una enfermedad de moda, el relajarme fue como un regalo.

Echando la vista atrás recordaba la primera vez que entré en quirófano… Recuerdo haberle preguntado al médico, en las visitas rutinarias de seguimiento postoperatorio, si había podido tener algo que ver el estrés laboral. Su respuesta, además de rotunda, fue en tono burlón y, obviamente, una negativa. Hablarle de si había podido somatizar los nervios y si mi cuerpo había respondido atacando un punto débil le hubiera parecido ciencia ficción así que desestimé la idea y seguí buscando información en Internet.

Así fue como topé con información acerca de la depresión de otoño o trastorno afectivo emocional (TAE) que se caracteriza por una serie de trastornos psicosomáticos que se producen en las personas a medida que avanza el otoño.

A pesar de que no soy el target óptimo para sufrirlo (digamos que aunque soy mujer aún no he llegado a los 45 años :)) me he propuesto empezar a prevenirlo así que, como con las cremas antioxidantes de noche, voy a dedicarme cada día un ratito a pensar en todas las cosas maravillosas que me rodean… Hoy por ejemplo me voy a deleitar recordando las vacaciones de este verano que aunque ya pasaron me siguen trayendo una sonrisa a la cara.

martes, 2 de octubre de 2007

Un mundo de emociones

Estaba anclada en la letra de una canción de Víctor Manuel “A donde irán los besos que guardamos, que no damos, donde se va ese abrazo si no llegas nunca a darlo…” y pensaba en las veces que evitamos, casi o totalmente conscientes de ello, mostrar nuestro afecto hacia alguien, decirle lo que sentimos… Es como si nos diese miedo o tal vez vergüenza hacerlo. Está claro que no nos han enseñado a “manejar” nuestras emociones y de ahí que en ocasiones nos convirtamos en una olla a presión.

Bueno… pensando en ello me acordaba de una piruleta en forma de beso que me dio un animador en medio de Pº de Gracia hace muy poquito… el chico me dio la piruleta y exigió un beso a cambio… yo se lo di. Ahora me imaginaba esa escena en un contexto menos festivo que el que acontecía ese día… Se me acerca un chico me pone una piruleta delante y me dice “te la doy si me das un beso”… y sin beso que se queda!!!!

En fin, sólo una reflexión sobre lo que a veces cuesta expresar lo que sentimos… Yo siempre me hago la misma pregunta: ¿Qué es lo peor que puede pasar? Al fin y al cabo estamos hechos de la misma pasta, los miedos, la vergüenza, la timidez, el amor propio, el orgullo… todo está descubierto… Seamos más creativos y cambiemos este mundo quejoso de afecto.